El «plan» de Ursula von der Leyen para ganar la batalla industrial
Mientras China y Estados Unidos han lanzado hostilidades para ganar la batalla de las tecnologías verdes, la Unión Europea (UE) prepara su respuesta. “Los europeos tenemos un plan”afirmó Ursula von der Leyen, en Davos, el martes 17 de enero y estará en el Viejo Continente para «posición en la delantera» en este curso de innovación que remodelará la industria del mañana.
En su discurso, Ursula von der Leyen denunció «intentos agresivos» destinado a atraer a los industriales europeos, en particular a los que trabajan en energías limpias, “a China y a otros lugares”. Ella también mencionó la «preocupaciones» que provocan la Ley de Reducción de la Inflación (IRA) de Estados Unidos, este plan de inversión para el clima de 369.000 millones de dólares (342.000 millones de euros) que prevé grandes ayudas para empresas anunciadas en Estados Unidos. “No dudaremos en abrir investigaciones si creemos que nuestros mercados (…) están distorsionados por tales subsidios”una promesa Ursula von der Leyen.
El ejecutivo comunitario, en conversaciones con Washington, espera llevar a Estados Unidos a ajustar el IRA, pero nadie imagina, ni en Bruselas ni en las capitales, que vayan a cambiar sustancialmente la situación. “La reacción de otros países no debería ser, ‘Dios mío, no deberías hacer eso, nos pone en una posición injusta’. Hazlo también. Todos deben hacer lo mismo para acelerar este proceso aún más”También juzgó, en Davos, el enviado especial estadounidense para el clima, John Kerry.
Contenido del Artículo
Beca Cursos
Ciertamente, pero la UE teme ahora que sus fabricantes cedan a las sirenas de Washington o Pekín y abandonen el Viejo Continente. Es cierto que combina las debilidades. En primer lugar, su industria verde depende mucho de China, India o Estados Unidos. “Por las tierras raras, imprescindibles para la fabricación de tecnologías clave [énergie éolienne, stockage de l’hydrogène ou batteries]Europa es ahora dependiente en un 98%” de China, llamada Ursula von der Leyen. “Para producir electricidad verde en 2050, los europeos tendrán que gastar 450.000 millones de euros al año. Este dinero no debe usarse para comprar no europeos y exportar nuestros trabajos”resume Thierry Breton, Comisario de Mercado Interior.
Además, la UE es muy lenta a la hora de autorizar determinadas ayudas de Estado de las que no pueden depender proyectos estratégicos: así, las alianzas industriales suelen tardar dos años en ver la luz. Finalmente, los Veintisiete no tienen los mismos medios y entre ellos hay una carrera de subvenciones para hacer inversiones que serían devastadoras para el mercado interior. A decir verdad, ya ha comenzado: durante los próximos diez años, Alemania prevé ayudar a sus empresas con 100 000 millones de euros para hacer su transición climática, los Países Bajos unos 40 000 millones y Francia unos 50 000 millones.
Te queda el 53,66% de este artículo por leer. Lo siguiente es solo para suscriptores.